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“El beso más pequeño”… Mathias Malzieu…“13. Como si su boca fuese un interruptor corporal mágico, capaz de volatilizarla. 15. Las mujeres invisibles son muy difíciles de encontrar, incluso cuando huelen demasiado bien. 37. El atetador: Tu cuerpo se parece, hasta confundirse con él, a ese árbol frutal que tiene la particularidad de no producir más que dos frutos por vida. Cuentan que si te duermes entre sus ramas te despiertas enamorado. 51. “It´s now? Never? Or when?...”…”No sé”…56. Cuanto más me gusta alguien, más tiempo desaparecía. Hasta que me enamoré y ya no volví a aparecer…Reaparecer después de tanto luchar y tener la impresión de no haber existido nunca. Cada vez que me enamoraba desaparecía. Nadie tenía tiempo para amarme de verdad. Incluso hubo veces que me olvidaban antes de dejarme, o que olvidaban dejarme. 58. Creo que después de haberme encendido y apagado tantas veces, mi cuerpo ya no soporta el amor…Creo que no he nacido para vivir las cosas de forma duradera, aparte de la invisibilidad. 59. A veces nos derrumbamos hasta tal punto que incluso la idea de la felicidad nos asusta. 69. Sólo pensaba en una cosa…huir a otro tiempo. 97. Cuando has vivido demasiado tiempo con un búnker en lugar de corazón, te acostumbras a la oscuridad. 128. Acabábamos de superar la cima de la montaña rusa. No quedaba nada que escalar. Ahora, el descenso. La gran aventura. Soltar la barra de seguridad, abrir los brazos al cielo y concentrarme en mantener los ojos bien abiertos. 139. Junto al árbol de horquillas crecía un pequeño batallón de zapatos de tacón…La herida del accidente de amor no se curaría, era inútil tratar de cauterizarla a cámara rápida…Había que avanzar…Detener la hemorragia. Las guirnaldas no sirven de nada en un árbol muerto, aunque siempre tranquilizan un poco…Esa impresión de exiliarme al otro lado de la vida.”