lunes, 2 de octubre de 2023

Milagros y Misterios… ”Haciendo manitas”

En mi profesión de curadora de obras de arte se tiende a observar el criterio de respetar el carácter actual de la obra a restaurar. Se da prioridad a sanear y recuperar un estado de conservación óptimo para la supervivencia de la misma sin añadidos que disfracen de una falsa unidad a una pieza. En ocasiones, especialmente en obras que se muestran al culto de los fieles de una comunidad, se permite aportar elementos que lejos de distorsionar, armonizan la visión, siendo “añadidos documentados” para permitir su identificación a ojos profesionales y conservar la historia material de cada obra.

Es muy frecuente encontrar esculturas con faltas de manos y dedos, pues son muy delicados. Y hay temporadas que casi todos llegan un poco “mancos”, así pues hay que hacer manitas y deditos sin parar. El cambio es sustancial y aporta a las imágenes la dignidad necesaria para estar expuestas al culto.